Caillou es un niño de cuatro años de edad que se divierte en el pequeño mundo que lo rodea, embelleciendo todo lo que observa con su rica imaginación. Al amparo de sus padres, su hermana pequeña, sus abuelos y sus amigos, Caillou descubre el mundo mientras espera impaciente el momento de crecer y disfrutar cada día.
Todo lo que encuentra a su alrededor se convierte en la excusa perfecta para emprender una nueva aventura, aprender cosas nuevas y pasarlo bien. Ya sea en la escuela, en su casa o en el parque, Caillou siempre busca la oportunidad de aprender algo nuevo.
Cada episodio de esta serie se convierte en una experiencia más de la vida de Caillou. Gracias a su extraordinaria imaginación, situaciones ordinarias se transforman en excitantes aventuras en donde el pequeño cree las situaciones que él mismo inventa. A pesar de ello, Caillou sabe perfectamente diferenciar la vida real de aquella que surge de su imaginación.
Después de jugar, Caillou regresa feliz a la rutina de un niño de cuatro años. De hecho, cada episodio comienza y termina anclado en el mundo real.
La respuesta a la pregunta de por qué Caillou es calvo es polémica: hay quienes dicen que el personaje y sus historias fueron creados, en un principio, para ayudar a sobrellevar la enfermedad a los niños con cáncer, a los cuales se les cae el pelo por culpa de la quimioterapia; pero parece ser que esto no es más que una leyenda urbana. La realidad, divulgada por los propios creadores de Caillou en un DVD que es una guía didáctica para los padres, es que la serie se basa en unos dibujos anteriores, en los que el personaje protagonista era un bebé y, por lo tanto, calvo. Como este personaje había adquirido ya cierta notoriedad cuando se abordó la serie actual, los dibujantes decidieron conservar su aspecto sin pelo y a los niños no pareció importarles. La palabra francesa „caillou” significa en español, „guijarro” o „canto rodado”, pero también, en argot, „cabeza” o „cráneo”, a menudo calvos.